jueves, 6 de marzo de 2014

LATINOAMERICA

Latinoamérica puede llegar a ser el mayor de los paraísos, pero también el mayor de los infiernos, lo tiene todo y no tiene nada, le sobran las riquezas pero su gente vive en la pobreza, es un pueblo de guerreros, pero como en tiempos pasados nos engañan con baratijas, en américa latina lo somos todo y no somos nada.

Somos un continente lleno de diferencias, de colores, de pasiones, de culturas, de raíces, de antepasados, somos el pasado y somos el futuro, somos los hijos de Pachamama, los que aun creemos en brujos y supersticiones.

En latinoamericano donde la naturaleza es nuestra fiel compañera, nuestros países se mueren de hambre, y lo hacen porque ya la tierra no es nuestra, pero no porque las leyes del hombre blanco lo digan así, si no porque le perdimos amor, ya no la sentimos como nuestra y a muchos les avergüenza que los rasgos indígenas aun estén en nuestros rostros; resulta que ahora con el sueño de todos ser blanquitos y con los ojos claros, nos olvidamos de que tenemos la piel oscura, esa piel que aguanta cualquier clima, por eso ya no nos duele que las multinacionales contaminen nuestros ríos, que talen nuestros bosques, que la violencia y el narcotráfico ponga en peligro la vida de nuestros indígenas, no nos duele que lo mas sagrado, nuestra Pachamama muera día a día.

Resulta ser que latínoamérica esta 500 años "atrasada", pero yo me pregunto ¿atrasada en qué? atrasada en dejar de lado el calor humano, o en ser felices con ver un atardecer, porque si es así sí, lo estamos, todavía tenemos el "don de gentes", aun tenemos esa sensibilidad que nos permite amar lo que la naturaleza nos da, todavía tenemos esa empatía por el prójimo, quizás si, aún debemos aprender miles de cosas, a ser mas iguales, a dejar las diferencias, a dejar las criticas, a vivir nuestras vidas, a respetarnos como derecho y deber de todos, pero ese camino se construye con el diario vivir.

Quizás, cuando todos recordemos que no hay mejor tierra que la propia, cuando recordemos nuestras raíces, cuando recordemos que mas allá del dinero y del poder somos simples humanos, quizás ahí vamos a luchar porque esta tierra, vuelva a ser la de antes, la de nuestros ancestros, la tierra compartida, amada, la  mía, la tuya, la de todos los latinos!